En el año 2013 una noticia sobre un estudio hecho por académicos de la Universidad de Oxford pronosticó que el 47 % de los empleos en los Estados Unidos serían reemplazados por robots, por procesos de automatización, computación y por Inteligencia Artificial. Esta noticia en su tiempo generó diversos artículos y columnas sobre las consecuencias de estas afirmaciones y se acuño el termino de “desempleo tecnológico”; que es el desempleo generado como consecuencia de la tecnología reemplazando a humanos. Figuras importantes del sector tecnológico como Mark Zuckerberg y Bill Gates admitieron que este fenómeno ya estaba ocurriendo y que deberíamos estar preparando el futuro para que las nuevas generaciones de fuerza laboral se adapten a estos cambios.
En el libro ¡Sálvese quien pueda!, Andrés Oppenheimer habla a profundidad de este tema y advierte que no es la primera vez que este tipo de pronósticos apocalípticos (donde la maquina reemplaza a la humanidad) sucede. Sino que coincidentemente se han repetido en cada revolución tecnológica que ha sufrido el hombre; sucediendo nuevamente en esta nueva que llamamos Revolución 4.0. Afortunadamente como lo menciona Andrés Oppenheimer en su libro, la tecnología siempre terminó creando mas trabajos de los que aniquiló.
¿Pero qué le espera a México y América Latina ante este nuevo reto?
México y los países que conforman Latinoamérica son países en vías de desarrollo. Esta situación de desempleo tecnológico nos afecta más debido a que el 60% de los puestos de trabajo en los países latinoamericanos analizados por el Banco Mundial (Ver tabla 1) son, en principio, susceptibles a los efectos de la automatización por ser trabajos manuales. Aunque la amenaza es inminente, hay tiempo debido al coste de la mano de obra; la cual sigue siendo mas rentable que la robotización/Automatización. Por esto, México tiene que aprovechar ese tiempo y volverse un país mas competitivo.
Tabla 1
Porcentaje de puestos de trabajo susceptibles de automatización en América Latina
País % teórico % ajustado
Guatemala 75% 46%
El Salvador 75% 46%
Ecuador 69% 49%
Costa Rica 68% 49%
Bolivia 67% 41%
Panamá 65% 47%
Nicaragua 65% 40%
Argentina 65% 65%
Paraguay 64% 45%
Uruguay 63% 63%
República Dominicana 62% 45%
Fuente: Dividendos digitales: informe sobre el desarrollo mundial 2016. Banco Mundial
México, que ocupa el puesto 69 en competitividad general, destaca en las tres variables de adopción de tecnología: utilización de la tecnología (52), inversión en tecnologías emergentes (62) y robotización (32). Existe un rezago sobre todo en el sur sobre estos rubros pero de ahí es donde nace la oportunidad de adoptar la tecnología para nuestro beneficio. De generar empleos mejor pagados y fomentar programas educativos con enfoques tecnológicos. Ademas, explorar también las oportunidades que genera la implementación de la inteligencia Artificial, que actualmente es muy utilizada en aplicaciones financieras y estadísticas así como para determinar tendencias comerciales. Pero no solo en esos rubros puede ser usada la inteligencia Artificial. Empresas como Mitsubishi están aprovechando los beneficios de esta tecnología en sus lineas de productos de Automatización. Por ejemplo, su linea de Variadores de Frecuencia FR-E800 Series cuenta con inteligencia artificial embebida en sus circuitos que nos ayuda para el mantenimiento preventivo y para prevenir daños por el entorno en el que esta instalado el dispositivo.
En conclusión, debemos estar preparados en todas las industrias para todo lo que va a representar este cambio provocado por la introducción de estas tecnologías. Y la mejor manera de tener una transición pacifica es empezar a utilizar todas las herramientas, generar experiencia y capacidad en su manejo.
